Agaete vive estos días su fiesta grande en honor a la Virgen de las Nieves, en la que tiene lugar la catártica y participativa fiesta de La Rama. Por sus callejuelas empedradas caminan propios y extraños para disfrutar del ambiente festivo y pasean su carisma diversos creadores como el genial (y aún jovial) Pepe Dámaso. Unas calles por las que dejaron huella muchos personajes del mundo artístico de varias épocas.
El Huerto de las Flores es un peculiar enclave agaetero que sorprende al que no lo conoce. En sus cuidados jardines se cultivaron especies botánicas de todo el mundo y mantiene impecable su aire romántico y evocador. Este reducto de exuberancia vegetal sirvió como punto de encuentro para grandes nombres de las letras canarias. El poeta Tomás Morales paseaba habitualmente por sus veredas y allí se encontraba con otros escritores coetáneos como Saulo Torón o Alonso de Quesada, que tertuliaban allí en las tardes de verano. Hoy sirve como espacio para conciertos y actos culturales.
Otras personalidades ilustres británicas, como Olivia Stone, también recalaron en Agaete. En 1927 le tocó el turno a una escritora de fama mundial, en una época muy oscura de su vida personal. Nos referimos a Agatha Christie, que arribó a Canarias sumida en una crisis afectiva y creativa. Según el escritor José Luis García Pérez, este viaje a las islas significó para la autora la cura anímica que necesitaba para seguir creando sus novelas policiacas. En sus siguientes obras utilizó algunos enclaves del Archipiélago como escenario de sus intrigantes crímenes. Es el caso de El Enigmático Mr. Quin, que ambientó en La Orotava. Asimismo, el relato La Señorita de Compañía incluido en su libro Miss Marple y los trece Problemas transcurre en Agaete, donde Mrs. Christie pasó unos días que recordó siempre con especial cariño.
Puede leer el cuento La Señorita de Compañía en este enlace y también El Enigmático Mr. Quin en este otro.
Foto: Alan Dawson Bajada de La Rama, Agaete 2006 por Revista BienMeSabe. Ver original.
